Directora de Técnica No.33 le impidió tomar clases.
Por estar en silla de ruedas y usar un fijador de tibia debido a una malformación congénita, Berenice N., una alumna de apenas 13 años fue acosada por Citlali Alonso Baños, Directora de la Secundaria Técnica No. 33 “Benito Juárez” ubicada en San Jorge Tezoquipan durante dos ciclos escolares, uno de ellos, donde le negó de forma indiscriminada la posibilidad de asistir de forma habitual a la escuela.
La denuncia hecha a Transición Mx, revela que, en este caso de discriminación en contra de una menor, alumna y persona con discapacidad, la Secretaría de Educación Pública (SEPE-USET) se ha negado a remover o despedir a Citlali Alonso Baños, Directora de la Técnica y contra quien pesan denuncias ante la PGJE, la Comisión Estatal de Derechos Humanos y el Jurídico de la SEPE.
Amelia Morales Torres, madre de la menor, refirió con pruebas a este medio la forma en que Citlali Alonso Baños negó a Berenice N., asistir a clases presenciales durante el ciclo escolar 2022, cuando por una cirugía hecha en diciembre de 2021 se presentó en silla de ruedas y con un fijador de tibia a clases.
“Mi hija nació con una malformación congénita de fémur y tibia, situación que le impide realizar actividades físicas, pero nadie nunca le había negado la educación, en mayo de 2022 volvía a clases cuando esta mujer le dijo que no podía tomar clases en un salón junto a sus compañeros, solo por el hecho de usar una silla de ruedas”
Morales Torres, afirmó que desde ese ciclo escolar su hija sufrió acoso, discriminación, daño psicológico y una serie de amenazas que la llevaron a intentar quitarse la vida dos veces, e incluso, a querer dejar de estudiar.
“Berenice vivió un infierno en esa escuela, incluso personal de la institución la acosaba, le sacaban fotos, la exhibieron en la sociedad de padres de familia; llegaron a decirme que ya dejara las cosas así, pero es mi hija y va a continuar estudiando. Yo no la saqué de ahí porque es la escuela de nuestra comunidad, la que más cerca nos queda, nadie me iba a apoyar con los gastos que implican cambiarla de colegio”
Para la familia Rivera Morales los últimos años han sido de trámites y defensa legal de su hija que se suma a la lista de cirugías constantes para revertir malformaciones de fémur y tibias, una adolescente que, pese a los obstáculos, pudo culminar sus estudios de secundaria gracias a una orden de protección que le concedió la PGJE.
“Berenice fue atacada por usar una silla de ruedas, pero mi hija no tiene ninguna discapacidad mental, sólo física, incluso Justino García (subdirector) me ofreció darme una boleta de nueves y dieces si accedía a no llevarla a clases”
Pese a que el caso es de conocimiento del Secretario de Educación, Homero Meneses, la situación laboral de Citlali Alonso Baños no ha cambiado, pues ni abogados ni testimonios ni procedimientos en otras instancias dedicadas a impartir justicia y recomendaciones han servido para sancionar a la Directora de la Técnica.
“Esa mujer desahució a mi hija, se negó a darle acceso a un baño para discapacitados en la escuela pese a que existe, la hizo ver como una persona que no es, una mala alumna, un estorbo para la comunidad estudiantil, incluso, la amenazó, a Citlali Alonso la protege el Director de Educación Básica de la SEPE-USET, pido que se investigue”.
En tanto, Berenice N., tuvo que asistir a su ceremonia de graduación acompañada de una patrulla, abogado, observador de derechos humanos y un enviado de violencia de género de la USET.
Ahora, en un modesto local frente al CBTis 211 pancartas en contra de la directora de la escuela son la evidencia de la violencia sistémica de un directivo escolar contra una alumna y una familia que subsiste vendiendo comida para pagar un costoso tratamiento médico.
