En Huamantla Salvador Santos Cedillo es el único que piensa que todo va muy bien.
Un día levantan a jovencitas, el siguiente, asaltan a comercios en pleno centro de la ciudad, luego, ingresan a las casas de prominentes empresarios.
Aparecen cadáveres, los vecinos se lían a golpes, cuando no hay un levantón ocurren tiroteos en el Cuamanco, en fin, pueblo quieto.
La última, la privación ilegal que terminó en homicidio de Jannet Gutiérrez López, una joven madre de 32 años oriunda del municipio de Huamantla.
Si no sabe le cuento, hasta hace algunos meses la hoy occisa mantenía una relación sentimental con uno de los líderes de la banda local “Los pelones” dedicados, adivine, a la venta de narcóticos.
A decir de quienes lo conocieron “El pelón” era un hombre tranquilo de origen Sinaloense que fue asesinado en condiciones sospechosas por otro cabecilla de una banda contraria dejando tres hijos y a Jannet viuda.
No fue el único que murió, después de él, le siguieron líderes de otras bandas locales.
Curiosidad o coincidencia, todos estos decesos ocurrieron desde que Santos Cedillo arribó a la alcaldía.
Ahora, mientras Chava Santos se divierte cultivando dalias y viajando al exterior para promoverlas, en Huamantla se pelean la plaza y eso implica hacer una limpia.
Dudas, hay muchas sobre el homicidio de Jannet Gutiérrez López, ninguna justifica su muerte ni la orfandad de quienes fueron sus hijos.
¿Qué buscaban sus plagiarios en la casa de San Lucas?, ¿Cómo fue que le quitaron la vida?, ¿Por qué llegaba de madrugada a su vivienda? y, sobre todo, ¿A quiénes beneficia su muerte?
Claramente no son dudas que esperemos nos conteste la Procuraduría de Justicia del Estado (PGJE) con sinceridad le tenemos más fe a la Fiscalía General del Estado de Puebla, dependencia que atrajo la investigación por haber sido en su jurisdicción localizado el cuerpo de Jannet.
Al tiempo…
Hasta la próxima
@Naye_Romero89
One Response
Muy bueno el reportaje !!