Esto que le voy a contar no lo digo yo ni lo inventé.
Fue publicado por Reporte Índigo la semana pasada.
Datos del Sistema Anticorrupción Estatal (su último reporte) revela que, en Tlaxcala durante el 2022 aumentaron en un 33% las denuncias por actos de corrupción cometidos por servidores públicos y funcionarios al mando de Lorena Cuéllar Cisneros.
Ah sí, existen denuncias por, anote bien, peculado, cohecho y enriquecimiento ilícito.
No solo eso, en Tlaxcala la Fiscalía Especializada en el combate a delitos de esa índole, reporta que durante el 2022 retrocedimos en materia de combate a corrupción.
Lo mejor, existen más denuncias que días del año, en total 388 denuncias fueron presentadas a través de múltiples medios durante el año que concluyó.
41 por el delito de peculado, 16 por cohecho, 6 por enriquecimiento ilcito, 213 por abuso de autoridad, 85 por ejercicio ilícito y abusivo del servicio público, 6 por uso ilícito de atribuciones y facultades, 3 por tráfico de influencias y dos más por delitos cometidos por personal de la PGJE.
¡Qué bonito! La peor parte, adivine, los 23 mil millones de pesos de los que Tlaxcala pudo disponer tan solo en 2022 están en manos de corruptos sin escrúpulos, cuya ambición desenfrenada se puede ver, sentir y denunciar.
Si algo nos faltara, en vano tenemos al dichoso Órgano de Fiscalización Superior (OFS) incapaz hasta hoy de auditar la totalidad de los recursos que manejan los entes fiscalizables, apenas una muestra del 52.6 por ciento pudo ser “auditada” es decir, 11 mil 986 millones. ¿Y el resto?
Temo decirle que la 4T nos quedó mal, actualmente en la silla del poder tenemos sentados a personajes ambiciosos e ignorantes de la Ley.
Alcaldes, presidentes de comunidad, servidores públicos en todas las dependencias de la administración de LCC.
Comenzando por una gobernadora incapaz de separar el ámbito familiar de su trabajo.
Tan solo en 2022 el OFS emitió 16 mil 089 observaciones y recomendaciones de las cuales apenas 7 mil 730 se solventaron.
Otro aspecto que no escapó a los ojos del Sistema Anticorrupción del Estado fue la obra pública, 3 mil millones de pesos gastados solo en un año. ¡Ah caray! ¿Qué construyeron?
No lo sabemos, pero si encontraron obras no acreditadas y de mala calidad, vaya, algunas ni existen.
“No habrá cabida para la corrupción, complicidad o contubernio, para nadie sin importar partido” ¿Segura Lorena?
Bien lo dicen, el pez por la boca muere.
Hasta mañana…
@Naye_Romero89