Alguien dígale a Ernestina Carro Roldán que existen penas para quien sustrae (padres o parientes), a los hijos sin resolución judicial.
Y que hacerlo, ocurre porque, en la actualidad, muchos niños son rehenes de padres trastornados y con desequilibrios emocionales.
Mire usted, recientemente en redes sociales se difundió un video donde se ve claramente cómo dos autos le cierran el paso a un tercero con el único objetivo de bajar de él a una niña para subirla a otro y continuar el día como si nada.
No, no es una escena de película, sucedió a plena luz del día en Acuitlapilco Tlaxcala.
Dicho esto, luego de miles de reproducciones donde se pedía dar con el paradero de la menor, pues se hablaba de un secuestro; la PGJE decidió apagar todas las alertas. Y de qué forma.
Primero, al referir que no se trató de un secuestro, más bien, el tema obedecía a un asunto entre particulares, familiar pues. Dos padres peleándose cual juguete a un hijo. ¡Una niña!
Después, al referir que ya existía un denunciante y, que éste, habría iniciado una investigación por el delito de privación ilegal de la libertad.
Cierto es que la señora Procuradora poco puede impedir las tragedias familiares, sin embargo, llama la atención lo disoluta que se ha vuelto la justicia en Tlaxcala.
Una entidad donde pese a la interminable retórica de protección de los derechos de la infancia, se han vuelto comunes los homicidios de niños a manos de sus padres o padrastros, las violaciones de las que son objeto ¡por su propia familia! Y calmar la hoguera social con un simple “ya abrimos una investigación”
¡No! Señora Procuradora, si el problema no es que dos padres se peleen a sus hijos, el problema son las consecuencias y traumas que ello implica para los menores.
El problema es que ustedes tratan los asuntos de familia como si fueran datos no personas.
Y son niños, son mujeres, son víctimas de violencia, son desaparecidos y son muertos.
Lo de esa niña no es un asunto entre particulares, es una privación ilegal de la libertad de una menor y debe ser penado.
Acaso ¿vio el video, notó el rostro de la niña?
Dos autos cerraron el paso a un conductor en plena vía pública señora, le bajaron a un menor de la parte trasera del coche y lo dejaron ahí, imaginando un mundo de posibilidades.
La próxima vez que decida valorar un hecho como “sensacionalista” junto a todo lo que se publica y no le parece, piense en el terror que viven muchos infantes en Tlaxcala. ¡No se vale!
Hasta mañana…
@Naye_Romero89
nayelir31@gmail.com
