Jeremy N., de tres años de edad fue calcinado en el municipio de la Magdalena Tlaltelulco en Tlaxcala.
En junio de este año familiares lo reportaron como desaparecido, sin embargo, investigaciones de la PGJE descubrieron que fueron sus padres quienes calcinaron al menor.
El pasado 8 de octubre el cuerpo de Jeremy fue exhumado y sus progenitores detenidos por inconsistencias a la hora de rendir su declaración.
Los autores del crimen dijeron saber dónde se encontraba el cuerpo de su hijo, de quien únicamente se pudo identificar la dentadura y sus huesos.
Al ser detenidos por oficiales de la PGJE los homicidas intentaron dañar al agente para darse a la fuga.
Ahora, los padres del pequeño Jeremy esperan su audiencia inicial.