La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) mostró preocupación por el asesinato en Estados Unidos de otro periodista durante el desempeño de su trabajo. La organización aprovechó para solicitar a los medios de comunicación que creen o activen protocolos de seguridad para proteger a los periodistas en coberturas de riesgo.
El 22 de febrero el reportero Dylan Lyons y el fotoperiodista Jesse Walden, del canal Spectrum News 13, en Orlando, estado de Florida, cubrían el asesinato de una mujer. Según la policía, el presunto responsable del crimen regresó a la escena y les disparó a los periodistas que estaban en su vehículo. Ambos reporteros fueron trasladados a un hospital. Lyons murió a las pocas horas y Walden se encuentra en estado crítico. El atacante fue detenido, pero previamente mató a una niña e hirió de gravedad a la madre de esta.
El asesinato de Lyons se suma al del periodista de investigación Jeff German, del diario Las Vegas Review-Journal, ocurrido el 3 de septiembre de 2022 en la ciudad de Las Vegas. Un funcionario local está acusado por el crimen, el que cometió en aparente represalia por la investigación del periodista.
El presidente de la SIP, Michael Greenspon, dijo que los casos de Lyons y German, así como de numerosos periodistas que fueron agredidos durante las manifestaciones públicas de los últimos años, “son claros ejemplos de que los periodistas estadounidenses también están expuestos a la violencia”.
Greenspon, director global de Licencias e Innovación de Impresión de The New York Times, Estados Unidos, instó a los medios de comunicación “a crear o activar protocolos de seguridad para prevenir incidentes violentos”.
El presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información, Carlos Jornet, coincidió con Greenspon. “Este caso nos muestra que ningún país del continente es inmune a la violencia”. Jornet, director periodístico del diario argentino La Voz del Interior, dijo: “No debemos esperar que el Estado sea el único responsable de velar por la seguridad de los periodistas; también es responsabilidad de los medios proveerles de las herramientas necesarias de protección”.
Años atrás, la SIP había solicitado la implementación de protocolos de seguridad cuando el 28 de junio de 2018 un hombre irrumpió en la sala de Redacción del diario Capital Gazette, de Annapolis, Maryland, y asesinó a los periodistas Rob Hiaasen, Wendi Winters, Gerald Fischman y John McNamara, y a Rebecca Smith, del área de Publicidad, en represalia por información publicada siete años antes en el periódico. La SIP también registró que entre enero y octubre de 2022 30 periodistas fueron agredidos, en algunos casos mientras cubrían protestas, y que 15 fueron arrestados ese año.
El último informe del Índice Chapultepec de la SIP coloca a Estados Unidos en la posición número siete de un total de 22 países del continente americano en materia de libertad de prensa. Según el Índice, la violencia que experimentan los periodistas en Estados Unidos “suele ocurrir durante la cobertura de protestas” y también “puede venir de grupos políticos e incidentes individuales asociados a delincuencia común”.